La biodiversidad es la preciada reserva de ecosistemas, razas y variedades vegetales que permiten a los organismos vivos adaptarse a los cambios medioambientales y proporciona la infinidad de sabores y texturas que se encuentran en las cocinas de todo el mundo. Es la historia de nuestra evolución.

La extinción de una especie animal o vegetal supone la pérdida sin remisión de un patrimonio genético irrecuperable, pero esto no es todo: también se pierden el sabor de un territorio, una técnica de cultivo exclusiva, un método tradicional de transformación alimentaria.

Hoy en día contamos con muy pocas especies de cultivo para la nutrición humana: menos de 30 plantas proporcionan el 95% de la nutrición mundial. En el siglo pasado se extinguieron 250.000 especies vegetales. Desde principios del siglo veinte, América ha perdido el 93% de sus productos agrícolas, Europa casi el 85%.

El Arca del Gusto

El Arca del Gusto recupera y cataloga sabores olvidados y productos gastronómicos de excelencia contrastada que se encuentran en peligro de desaparición. Desde 1996, más de 750 productos de decenas de países de todo el mundo han sido agregados al Arca, desde el argentino maíz de Capia hasta la miel de tomillo de Monti Iblei en Sicilia o el pan de Kalakukko finlandés. Gracias al Arca, estos alimentos están documentados y reconocidos.

El Arca del Gusto resucita razas singulares y promueve el valor intrínseco de los productos alimentarios que ofrece la tierra. La Comisión del Arca de cada país (compuesta por investigadores, científicos y expertos en alimentación) selecciona los productos y la Comisión Internacional, compuesta por representantes de las nacionales, determina las directrices y evalúa los productos candidatos de los países que aún no cuentan con una comisión del Arca.

Los Baluartes

Los Baluartes son proyectos a pequeña escala para el asesoramiento a grupos de productores artesanales. El concepto fue desarrollado por Slow Food en 1999 para fomentar la presencia de diversos alimentos tradicionales en el mercado. Desde el trigo nativo Red Fife de Canadá hasta el aceite de Argan marroquí o el bogavante holandés de Oosterschelde, los Baluartes de Slow Food trabajan en todo el planeta para promocionar alimentos, desarrollar mercados, salvaguardar patrimonios y educar a los consumidores.

Las estrategias de los Baluartes varían según el proyecto y el producto: desde agrupar a los productores, coordinar la promoción y establecer directrices de autenticidad hasta la inversión directa en instalaciones. Pero sus objetivos permanecen invariables: promocionar los productos artesanales, establecer estándares de producción que aseguren un producto de calidad, y sobre todo garantizar a estos alimentos un futuro viable.

El Galardón Slow Food

El Galardón Slow Food por la Defensa de la Biodiversidad identifica y reconoce la investigación, la enseñanza, la producción y la promoción que benefician a la biodiversidad en el contexto de la alimentación. Los nominados son seleccionados por un jurado internacional de más de 500 periodistas y expertos en agricultura, alimentación y medios de comunicación.

Los galardonados son personajes anónimos que se distinguen por su meritorio trabajo en defensa de la biodiversidad, de la recuperación de especies o tradiciones, del restablecimiento de la justicia social o ecológica, etc.

Terra Madre

Terra Madre, celebrada por primera vez en Octubre de 2004 en Turín, Italia, es la conferencia internacional de las comunidades del alimento de Slow Food que reúne a miles de campesinos y productores de alimentos de más de 120 naciones. Una cita de una magnitud sin precedentes que congrega a quienes intentan plantar, cultivar, recoger, distribuir y promocionar alimentos mediante procedimientos respetuosos con el medio ambiente, defienden la dignidad humana y protegen la salud de los consumidores.

Durante cuatro días, los delegados participan en talleres y foros de discusión con una estructura en torno a los temas neurálgicos de la sostenibilidad, biodiversidad, comunidad y desarrollo local. Conjuntamente, diversos productores exploran asuntos importantes y debaten soluciones a los desafíos comunes para producir alimentos de manera sostenible. Terra Madre proporciona a un cultivador de albaricoques de California la oportunidad de hablar con un hortelano de Perú, intercambiar ideas entre los pescadores costeros italianos y españoles, y compartir comidas, discusiones y amistad entre cultivadores de trigo canadienses y etíopes. Una celebración del pequeño agricultor que cuenta con múltiples y valiosos apoyos.

Terra Madre ha supuesto un impulso para la creación de nuevas redes internacionales de producción y distribución de alimentos artesanales, excavando un nicho en un mundo dominado por la agricultura industrial. La primera experiencia de Terra Madre ha animado a campesinos, productores y distribuidores a organizar encuentros a menor escala, constituir sitios web para intercambiar información y cooperar en proyectos de marketing y promoción. La próxima edición de Terra Madre está prevista para 2006, y se orientará a reforzar los vínculos entre cocineros y productores procedentes de todo el mundo, congregando a ambas comunidades para discutir asuntos de interés mutuo.

La Fundación

Slow Food por la Biodiversidad es la entidad sin ánimo de lucro que gestiona los proyectos ecogastronómicos de Slow Food. Fundada en 2003 por el movimiento Slow Food en asociación con la Región de Toscana, su misión consiste en organizar y patrocinar proyectos que defiendan nuestro patrimonio mundial de biodiversidad agrícola y tradiciones gastronómicas.

Las contribuciones financieras directas de la Fundación se destinan principalmente a los países menos desarrollados del mundo, en los que la conservación de la biodiversidad no sólo significa incrementar la calidad de vida, sino incluso salvar vidas, comunidades y culturas.