Desgraciadamente todo lo bueno se acaba y llegamos a la última jornada de estas V jornadas Culturales en defensa del patrimonio alimentario y gastronómico, pero con una perspectiva de continuidad, de satisfacción de haber cumplido los objetivos marcados y con la esperanza de continuar en este camino tan importante para valorizar nuestros productos y nuestra alimentación sostenible en un marco cargado de valores medioambientales y de respeto a la buenas labores de nuestros Intelectuales de la Tierra.
Era el último día pero había que difundir nuestros principios de defensa de la biodiversidad, de la educación del gusto, del trabajo educacional en colegios y la difusión de una alimentación saludable a través de los huertos escolares y de los talleres de cocina, de la defensa de nuestras razas autóctonas y de nuestra diversidad y como siempre nuestro Presidente, Alberto López de Ipiña, inició la jornada disertando sobre estos aspectos tan importantes.
Seguidamente dio paso a los oficiantes de esta última jornada como eran Laura Muñoz, regente de restaurante Urgora de Torre y su más que ayudante Aitor López de Heredia que ha demostrado que está suficientemente maduro para iniciar su propia andadura en los fogones. Además con la salvedad de la sensibilidad que muestran por toda la filosofía que defendemos y que la tienen marcada en su piel (defensa de los productos de calidad de los productores responsables de la biodiversidad de un tratamiento de nuestra tierra que garantice la supervivencia de generaciones venideras).
Comenzó Laura con un aperitivo de Crema de Membrillo, por supuesto ecológico, como todos sus productos, y una tela de queso ecológico de oveja latxa.
Este plato nos lo maridó Leticia Plágaro con el txakoli especial Eukeni. Este Txakolí se elabora en el pueblo de Artomaña que pertenece a Amurrio, en una bodega recién creada, primera elaboración vendimia 2009.La bodega dispone de 20 Ha. y ha utilizado las mejores fincas para la elaboración de este txakolí. Tras una fase de elaboración rigurosa para obtener una altísima calidad, nos encontramos con un txakolí de color amarillo pajizo claro y sabor penetrante y homogéneo con un pequeño matíz de acidez. Mantiene una cuidada presentación y la marca es un homenaje de los propietarios de la Bodega a D.Eugenio Alava ya fallecido, protagonista de la recuperación del txakolí alavés cuando estaba a punto de su desaparición en 1985.
Seguimos con un puré de calabaza ecológica con bechamel y buñuelos de verduras.
Este plato lo degustamos con Dominio de Berzal fermentado en Barrica:
A esta delicia le siguió un rodaballo al horno, con salsa de almejas y tempura de viera y falso sushi; un plato sorprendente y con una carga de trabajo para conseguir productos ecológicos para realizar la citada creación.
Esta creación se acompañó con un Don Peduz; esta bodega de Hnos Frías del Val nace en 1969 como una empresa familiar, remodelándose en el año 2000. Fruto de su buen hacer ha recibido numerosos premios en concursos de vinos. La bodega se abastece con viñedos propios con cepas de más de 100 años, con variedades de tempranillo y viura dispuestos mediante sistema de plantación en vaso. La elaboración se realiza mediante maceración carbónica. En la actualidad se está iniciando en la agricultura ecológica. El vino Don Peduz, que degustaremos contiene un 95% de Tempranillo y un 5% de Viura con 14,5% de Alcohol. Ha recibido un premio en la última Feria de la Vendimia 2010, al mejor vino de maceración carbónica de La Rioja.
Seguimos este camino gastronómico con unas carrilleras al vino tinto con puré de manza, brócoli y rulo de queso de cabfra a la plancha. Este fenómeno plato lo maridamos con Rioja Leantanza. Reserva.
Aitor entró en acción ofreciendonos un maravilloso helado de Gin Tonic y espuma de frambuesa.
Y finalizamos con unas hormigas (o gatzas) con frutos rojos, agua de remollacha, miel y harina en pasta file.