Slow Food, convivium Araba-Álava junto con la Escuela Agraria de Arkaute – Itsasmendikoi (IMK) Arkaute organizó el pasado día 15 de octubre de 2014, en el aula de Presentaciones Telletxea Aretoa de Egibide, un encuentro bajo el título “Imaginando Nuevos sistemas Alimentarios” con los alumnos del ciclo superior de Gestión de empresas agropecuarias.
Eduardo Urarte de Slow Food Araba-Álava dirigió el grupo de la organización desarrollando toda una jornada excepcional y altamente apreciada por los alumnos y profesorado de la escuela.
Fue verdaderamente reseñable la atención e interés de estos alumnos durante toda la mañana que fue de menos a más en cuanto a la realización de preguntas e inquietudes surgidas a lo largo de la misma. Estos encuentros con el futuro de nuestra sociedad son el carburante para seguir trabajando en este campo ya que nos animan a continuar al recibir esta satisfactoria respuesta.
Actualmente nuestra esfera sensorial se ha empobrecido notablemente. El tacto, gusto, olfato han sufrido una regresión notable.
El tiempo libre cada vez más escaso y la velocidad de nuestras vidas nos están privando de los instrumentos que pueden permitirnos un conocimiento más profundo, variado y auténtico del mundo que nos rodea. Por ello, adiestrar nuevamente nuestros sentidos, reagudizar la percepción, son aspectos fundamentales en la filosofía Slow Food. Las jóvenes generaciones, en particular, corren el riesgo de perder, además de sus vínculos con el territorio y su relación con las estaciones, el sentido mismo del acto de alimentarse.
Esta es la justificación para poner en marcha los Laboratorio del Gusto, instrumento utilizado por Slow Food para divulgar la cultura de la comida y el vino, a través de Talleres sensoriales y para desarrollar los sentidos con esos alimentos.
Comenzó con el mismo con la presentación de la Jornada y de los ponentes por parte de Eduardo Urarte encargado de dirigir las actividades; como inicio un largometraje titulado Food INC un documental estadounidense de 2008 dirigido por el cineasta ganador de un Emmy Robert Kenner. El filme está ligeramente basado en el bestseller de no ficción del 2001 Fast Food Nation, de Eric Schlosser, y The Omnivore’s Dilemma de Michael Pollan. El primer segmento del filme examina la producción industrial de carne, a la cual llama inhumana y económica y ambientalmente insostenible. El segundo segmento se centra en la producción industrial de grano y verduras, a la cual también califica de económica y ambientalmente insostenible. El tercer y último segmento trata sobre el poder económico y legal de las grandes compañías de producción de alimentos (que se basa en ofrecer comida barata pero contaminada con químicos a base de petróleo, sobre todo pesticidas y fertilizantes) y la promoción de hábitos de consumo de comida insalubre hacia el público estadounidense.
Acto seguido Eduardo Urarte indicó el interés que tiene Slow Food en hacerles llegar el trabajo y la filosofía de esta asociación internacional sin ánimo de lucro y la explicación de estas jornadas con los que en un futuro próximo dirigirán instalaciones agropecuarias, pasando la palabra a Javier Chávez, Presidente de la Fundación Zadorra que realizó una excelente apología a la producción y consumo de estevia, planta paraguaya con propiedades curativas para nuestra salud y también para la salud de la tierra. Su disertación la acompañó con una infusión de estevia.
Continuando con las propuestas de Javier a Alberto López de Ipiña le tocó dar unas pinceladas sobre la filosofía y de Slow Food y la nueva etapa de la organización poniendo sobre la mesa “La Centralidad del Alimento” para pasar a un laboratorio del Gusto dedicado a la raza autóctona en peligro de extinción como es el Caballo de La Montaña Alavesa.
Víctor López Izquierdo nos contó como maneja este ganado en Okina y todo el proceso para que a través de la Comunidad del Alimento de la Carne de Potro de la Montaña Alavesa y comercializándola como Zalmendi llega hasta nuestras casas. También nos comentó la posibilidad de todo co-productos de visitar su explotación y comprobar in situ su trabajo y el fruto del mismo.
Alberto presentó un carpaccio de carne de potro, una albóndiga de esta misma carne al vino tinto de Rioja Alavesa maridada con un txakolí de Bodega Bat de Amurrio.
Algunos de lo mensajes fueron captados rápidamente por los alumnos como que Europa importa el 90% de soja para sus piensos del otro lado del Océano por conocidas empresas de las que no haremos desde aquí publicidad. Temas de transporte, en los que se da la paradoja de que productos hortícolas, nacidos en Europa, se transportan al Centro de África, donde, debido a las subvenciones que reciben los agricultores europeos, son vendidos más baratos que los productos locales, con lo cual se da la puntilla a los agricultores africanos. También apareció en esta jornada el conocido tópico de los miles de kilómetros que muchos productos llevan a sus espaldas, cuando el mismo producto se produce localmente.
En el laboratorio del Gusto se incidió en las comunidades del alimento, hoy propiciadas por Slow Food pero que en un futuro no muy lejano será seguro una herramienta básica en nuestros suministros de productos alimentarios. Una exposición perfectamente coordinada por Eduardo Urarte.
El laboratorio del gusto estuvo presidido por el slogan “Bueno, Limpio y Justo”. BUENOS, los alimentos tienen que ser organolépticamente agradables, en definitiva que nos den placer al comerlos y buenos para la salud; LIMPIOS, ya que su producción tiene que realizarse con el mínimo impacto ambiental, huir de transgénicos, abonos químicos, etc.; y por último JUSTOS, que nuestros “intelectuales de la tierra” (agricultoras, ganaderas y pescadoras) reciban la compensación económica ajustada a su trabajo y labor social realizada.
Los consumidores o co-productores como nos definimos desde Slow Food nos tenemos que asociar con los productores involucrándonos en con ellos asumiendo un compromiso que nos permita obtener alimentos saludables y a ellos asegurar su rentabilidad y trabajo.
En definitiva otro granito de arena que esperemos que de sus frutos a medio plazo. Mila esker a todas las personas que habéis hecho posible esta Jornada